Hoy le vamos a sacar la vuelta a la famosa masa de hojaldre, sí, esa masa con la que hacemos el mil hojas.
Y es que la verdadera es laboriosa, no es que sea complicada, simplemente toma tiempo y necesitamos mucha paciencia para llegar a tener una masa óptima.
La masa de hojaldre tiene esa magia que cuando se hornea se forman innumerables capas de masa súper fina. Esa es la cualidad que más aprecio, porque la otra es ese sabor a mantequilla que para muchos la hace exquisita.
Cuando se hace la masa de hojaldre hay que cuidar dos aspectos muy importantes, el primero es la calidad de la mantequilla, no vale usar margarina o algún sustituto vegetal, lo siento, eso no se puede hacer. Es más, es súper recomendable el uso de una mantequilla de origen europeo, específicamente, francesa. Es lo óptimo.
El segundo, el frío. Siempre que trabajemos este tipo de masas hay que cuidar que los ingredientes estén siempre fríos y que la masa se mantenga también siempre fría, es por ello por lo que siempre verán que estas masas necesitan tiempos de refrigeración. Naturalmente el clima influye mucho, ya que, si hace calor, es posible que la masa necesite entrar a la refri más veces que cuando hace frío.
Con la verdadera masa de hojaldre, cuya elaboración puede tardar hasta dos días, es con la que se hacen los famosos croissants. Con esta masa de hojaldre falso también pueden hacerlos, pero obtendrán lo que llamo un falso croissant, así que no es lo más recomendable, pero pueden intentarlo.
Entonces, ¿para qué nos puede servir este sustituto? Pues por ejemplo para hacer las famosas orejitas de chancho, también conocidas como palmeritas. Se puede usar como base para una tarta de manzanas o para hacer unos riquísimos palitos de queso. Para este tipo de preparaciones esta masa resulta estupenda.
El paso a paso para preparar este Hojaldre Falso lo pueden ver en este video.
Y aquí tienen la receta completa para que la puedan imprimir:
Hojaldre Falso
Ingredientes:
- 250 g de mantequilla sin sal fría
- 250 g de harina sin preparar
- ¼ cucharadita de sal
- 50 – 75 ml de agua fría
Preparación:
- Cortar la mantequilla en cuadritos pequeños, espolvorear con un poco de la harina y refrigerar hasta su uso.
- En un tazón, de preferencia que esté bien frío, colocar la harina y mezclar con la sal.
- Agregar la mantequilla y con los dedos presionarla con la harina de modo que se deshaga y se queden pedacitos muy pequeños, máximo del tamaño de una alverja.
- Hacer un hueco en el centro, agregar un poco del agua fría y con las manos unir la masa. Si sienten que está seca, agregar más agua fría una cucharada a la vez. Es posible que no se llegue a usar toda el agua.
- Colocar la masa sobre la mesa y juntarla con las manos, sin amasar, para formar un disco. Forrar con film y refrigerar por 20 minutos.
- Colocar la masa sobre la mesa ligeramente enharinada y con un rodillo estirar formando un rectángulo de 20 x 10 centímetros, donde el lado angosto esté frente a ustedes.
- Por el lado corto de la masa, doblarla en tres capas, como un papel de carta, retirando cualquier excedente de harina. Esta es la doblez número uno.
- Girar la masa un cuarto (90 grados), volver a estirar en rectángulo, doblar en tres, retirar el exceso de harina, envolver en film y refrigerar por 30 minutos. Esta es la doblez número dos.
- Repetir el paso 7 y 8 dos veces más, de modo que al final se hayan hecho seis dobleces.
- Después de la sexta doblez, estirar un poco la masa, forrarla con film y refrigerar por una semana o llevarla al congelador hasta por tres meses.
- Para usar la masa que estuvo congelada, primero colocarla en la refrigeradora para que se descongele, pero se mantenga fría y luego darle el uso que se necesite.
Receta inspirada en: Rough Puff Pastry de Michel Roux.