Como parte de su gira «Días Nuevos», Gianmarco se volvió a presentar en el Cocodrilo Verde. Como siempre, el show fue un éxito y creo que todos los que tuvimos la suerte de estar ahí disfrutamos cada segundo.
¿Cuántas admiradoras creen que tenga Gianmarco, cientos, miles?…no, no tengo el dato, pero lo que sí les puedo decir es que de todas ellas conozco a una que yo diría es su más grande admiradora, créanme que compartir con ella la mesa durante la presentación de Gianmarco fue algo muy especial.
Recuerdo que en el verano recibí un entusiasta correo de Rosella para ver quién la quería acompañar a ver a Gianmarco, en esa oportunidad se presentaba en La Estación. Con mucha pena tuve que declinar, en esos días estaría en Vichayito con mi familia, así que no la pude acompañar.
Hace unos días estaba en la oficina concentrada en mi trabajo de todos los días cuando de pronto llegó un correo, tan entusiasta como la primera vez, así es, era Rosella preguntado quién la quería acompañar a ver a Gianmarco, esta vez en el Cocodrilo Verde…sin pensarlo más respondí: «yooooooooooo»…y junto conmigo dos más se animaron a ir, así que ya eramos cuatro.
Ella se encargaría de todo, así que fue a comprar las entradas, el sitio ya estaba casi lleno, quedaban unos pocos sitios en la parte de atrás, pero no importaba, igual el lugar no es muy grande y la idea era estar ahí, no importaba dónde. Fue entonces cuando el señor que la atendía le dijo que quizás podía conseguirle otra mesa, tardó unos minutos en hablar con alguien más y finalmente le dieron una mesa en primera fila, es que tenía que ser así, aunque creo que si alguna de nosotras hubiera ido por las entradas no hubiera pasado lo mismo, tuvimos mucha suerte…!!!
Llegó el gran día, las cuatro iríamos juntas, pero claro, cuando ya estábamos en camino a la casa de Geraldine para recogerla, nos mandó un mensaje de texto diciendo que seguía en el trabajo y que ella nos daría el alcance en el local. Estando ya en la puerta esperando que nos abran recibimos otro mensaje de texto diciendo que no iría, que se le había complicado todo…no, eso no era posible ¿cómo podía hacernos esto?
Abrieron la puerta del local, entregamos las entradas y nos guiaron a nuestra mesa…ahhhh…no sólo estábamos en primera fila, nuestra mesa estaba exactamente frente al piano que usaría Gianmarco…éxtasis total…!!!
Estábamos ya bien ubicadas, pensando qué hacer con la entrada que nos sobraba cuando un nuevo mensaje llegó al celular de Marissa, era Geraldine confirmando que sí llegaba. Lo máximo. Así que mientras la esperábamos fuimos entrando en calor con un delicioso Pisco Sour.
(*) Pisco Sour 15.00 soles
El trago abre el apetito saben, dimos una mirada a la carta y decidimos por los piqueos. Nos dijeron que demoraban como 20 minutos en traerlos, así que eso daría tiempo a que llegue nuestra amiga, pero claro, además decidimos pedir todo de una vez porque si demoraban tanto no sería lo ideal estar en plena presentación y nosotras comiendo. Así que llamamos al mozo para que tome nuestro pedido. Me encantó el sistema que tienen para eso, simplemente hay que poner al cocodrilo en el parante.
Pedimos tres piqueos: Bolitas de Causa con Lomo (causitas fritas adornadas con lomo saltado), Bruschetas (compota de tomate en aceite de oliva, coronados de aceitunas, alcaparras y queso parmesano sobre tostadas al ajo) y los infaltables Tequeños (rellenos de queso con crema de guacamole). Justo cuando los traen llegó Geraldine…ahora sólo faltaba que llegue Gianmarco, así que aprovechamos en comer. Debo decir que los tequeños estaban muy buenos y es que estaban crocantes, con el queso en su punto, es decir, no completamente derretido y la salsa de palta bien cremosa, aunque se nos quedó un poco corta y tuvimos que pedir más.
(*) Tequeños 18.00 soles
Las bruschetas no estaban mal, lo bueno es que vienen varias, así que son perfectas para compartir. Para mi gusto tenían mucha compota de tomate y se sentía muy poco el sabor al parmesano y al ajo de la tostada, pero bueno, son gustos.
(*) Bruschetas 20.00 soles
Las causitas…estaban ricas, pero totalmente frías, al ser fritas deberían estar calientes o por lo menos tibias, pero no, y lo peor de todo es que el lomo también estaba frío, pero totalmente frío, daba la impresión de que lo habían tenido listo hacía horas, una pena porque de sabor estaban muy buenas y la salsa ni qué decir, con ese sabor tan rico de lomo soltado…pero también fría.
(*) Bolitas de Causa con Lomo 20.00 soles
Estábamos terminando de comer cuando de pronto se escuchó un barullo, se abrió una puerta y Gianmarco hizo su aparición, saludando a la gente, su gente, pasando entre las sillas, dirigiéndose a…oh Dios, dirigiéndose al piano…!!! Pasó junto a nosotras, saludando muy alegremente, subió al estrado, se sentó junto al piano y sus dedos comenzaron a moverse despreocupadamente por las teclas del piano, suavemente comenzaron a salir las primeras notas….y poco a poco comenzó a salir su voz, esa voz inconfundible que hace vibrar a más de uno…así daba inicio a una noche espectacular.
Luego del piano pasó junto a su banda, tomó la guitarra y siguió cantando, entre canciones nuevas y canciones antiguas, todos cantando los coros, pero claro como bien dijo: «si la saben canten, si no la saben apréndanla».
Y es que Gianmarco no sólo canta, también anima, hace participar a la gente, conversa con la gente, bromea con la gente…es auténtico…y como diría Joel Gonzales, tiene esa «simpatía y carisma» que lo hace encantador.
En un momento despidió a toda su banda y se puso a dialogar con el público, hacía unos ruidos con su boca y sus pies comenzaron a juguetear con no se qué aparato que creo servía para grabar…yo estaba esperando en qué momento derribaba la copa de vino. Dicho sea de paso, ¿me pareció o era la misma copa con la que inició el concierto?
¿Y quién va a un concierto de Gianmarco y le mira los pies? Está bien, fue sólo unos segundos, estaba pensando en la copa de vino, por eso desvié mi mirada, pero en verdad les digo que mis oídos estuvieron todo el tiempo pendientes de su voz y mis ojos, mis ojos, esto es lo que vieron mis ojos toda la noche…
Pero bueno, la noche transcurrió muy rápido, cuando nos dimos cuenta él ya estaba cantando su última canción, hizo su última broma y se despidió de todo su público, la gente no dejó de aplaudir hasta que se perdió por los pasillos del restaurante…Rosella, la próxima vez te vuelvo a acompañar, la pasé lindo…!!!
¿Alguien más nos quiere acompañar?
Cocodrilo Verde – Gourmet Lounge
Dirección: Calle Francisco de Paula Camino 226 – Miraflores
Teléfono: 242-7583 / 444-2381
Correo: adm@cocodriloverde.com
Página web: www.cocodriloverde.com
Sounds like you had a wonderful night of food and music! 😀
Yes Lorraine…we love Gianmarco…!!!
Que fanática…!!! =)
Ja, ja, ja…la verdad es que es primera vez que voy a verlo…el sujeto es bueno, canta lindo…!!!
Such a nice post! It seems like you had a great time! It was almost like being there too! I would have loved some pisco sour!! 😉
Thanks Manu, we really had a good time.