Hay algo que no puedo evitar y es que cuando como pastas que contienen gran cantidad de salsa, me provoca tanto tomar un trozo de pan y con este levantar la salsa que queda en mi plato.
Por eso cuando como pastas sin duda me provoca además comer pan, harina con harina, sí, no me importa, y mucho menos si al lado tengo una deliciosa focaccia hecha en casa.
Pensé que el calor ya nos abandonaría y con eso reencontrarme más amablemente con el horno de mi cocina, pero no es así, el calor sigue y los fines de semana aún están a 30°C por esta zona de Lima, es inevitable salir corriendo de la cocina. Pero tenía tantas ganas de reencontrarme con la levadura que hizo que tomara fuerzas y me ponga a trabajar en un pan, bueno, no es un pan exactamente, pero digamos que el proceso es el mismo: masa con levadura, y si bien el calor ayuda con el levado, la cocina es un infierno.
Esta receta es del libro Maestro Panadero de Marcelo Vallejo, y la verdad es que la he hecho varias veces, aunque es la primera vez que le pongo tomate, normalmente la hago solo con romero y sal, pero a mi hijo le encanta con tomate. Cada vez que vamos a Don Mamino a tomar lonche, él siempre pide una focaccia de tomate y se la come toda, así que le di el gusto y esta vez en casa la hice con tomate.
La receta del libro es para dos focaccias, así que siempre hago la mitad, queda muy rica, pero como todo pan que se hace en casa pierde sus cualidades con el tiempo, es mejor comerla toda desde el momento que sale del horno y no guardarla.
Encima de la focaccia solo le puse tres cosas: tomate (que me quedé corta, creo que debí ponerle más rodajas), romero fresco (lo saco de mi jardín, sí, es una ventaja poder tener hierbas frescas) y finalmente sal gruesa, que en verdad es sal rosada de Maras, me encanta que queden trocitos porque uno los rompe con los dientes en la boca y llena toda la focaccia de sabor.
Pero claro, si ustedes quieren, pueden hacerla sin tomate, o ponerle además algunas cebollas, o ponerle albahaca, o aceitunas, la combinaciones son muchas y lo importante es tener la base, la cual lleva unos pocos ingredientes, solo hay que tener la paciencia necesaria para dejar que la levadura haga su trabajo.
En un tazón colocar la harina, sal y levadura seca y mezclar con una espátula de madera.
Hacer un hueco en el centro y agregar el agua tibia y el aceite de oliva y mezclar con la espátula de madera.
Llevar a la batidora con el adaptador de gancho y amasar hasta que la masa se desprenda de los bordes del tazón. Esto puede hacerse a mano sobre la mesa.
Hacer un bollo con la masa y colocarlo en el tazón ligeramente aceitado. Cubrir y dejar leudar hasta que duplique su tamaño. Esto puede tomar entre 1 1/2 a 2 horas. Yo coloco el tazón dentro del horno apagado para evitar las corrientes de aire.
Retirar, desgasificar y extender la masa dentro de una placa para horno aceitada. Esto lo hacen con las manos. Cubrir con film y dejar reposar por 20 minutos.
Con la yema de los dedos hacer presión en toda la masa para que quede hundida por todas partes.
Pinchar ramitas de romero por toda la masa, colocar rebanadas de tomate y espolvorear sal gruesa. Si desean pueden ponerle más aceite de oliva, yo no le puse porque particularmente no me gusta la focaccia muy grasosa.
Hornear a 430°F/220°C por unos 25 minutos, hasta que vean que la superficie comienza a dorar.
Retirar, dejar entibiar lo suficiente para que la puedan manipular.
Dame, dame, dame…Dame la foccacia!!! 🙂 Nydia, honey, could you please send me the whole thing? I am salivating…
Ja,ja,ja…pero le faltó tomate, debí haberle puesto más…
Me encanta la focaccia!!! y esta tiene una pinta….me apunto la receta!!
Sale muy bien, a ese libro le tengo mucho cariño porque las recetas que he hecho me han salido bien.
Hola Nydia, qué significa desgasificar? Y, es harina preparada o sin preparar?
Gracias, me encantan tus recetas y las hago!!!!
Hola Marisol, desgasificar es cuando bajas la masa cuando ya ha levado. Cuando la dejas reposar, la masa duplica su volumen porque se llena de gas producto del fermento de la levadura, entonces hay que quitárselo para porder la forma a los panes, a eso se llama desgasificar, simplemente le das con el puño y verás cómo se te hunde y masa baja.
Hola! Puedo usar la masa para hacer pizza?
Saludos!
Hola Malena, bueno, si usas masa de pizza entonces en verdad tendrás una pizza pero sin queso 😉
Pero todo vale, puedes hacerlo si deseas…
Se ve muy linda–tambien es muy rica con tomates secos hidratados en aceite de oliva 🙂
Claro Flor de Maria, a mi me encantan esos tomates deshidratados porque tienen mucho sabor, una opción perfecta…!!
That foccacia looks fantastic! I love the arrangement of tomatoes and herbs on top 😀
Thanks Lorraine…!!!
Que delicia! Me encanta la Focaccia. Mi papa tenía un restaurante con este nombre, y siempre servían una cesta llena de Focaccias para acompañar la comida. Me encantaba!!! Un beso
Es que súper rica, un buen troz es perfecta para servir justo antes del plato principal. Me encanta ponerle un piquito de aceite oliva cuando aún está caliente.
Me encanta la focaccia!!! ideal para comer una noche de primavera-verano.
besitos
Es verdad, además que en esa época los tomates están súper dulces.
Te he dejado otro premio bien merecido en mi blog:
http://demiblogatucocina.com/2013/04/21/bollitos-de-leche-mi-segundo-premiooo-d/
Un beso 🙂
Homemade focaccia!!! I think my family will finish when it comes right out of the oven. Fresh focaccia is THE BEST. This looks so yummy, Nydia!
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