Si vas a Cuzco puedes tener la opción de quedarte en la ciudad y pasarla súper bien con todo lo que ella ofrece.

Pero también tienes la opción de darte un salto al Valle y caer por Maras y Moray, destinos que hoy en día se han vuelto bastante populares.

Maras, ubicada a más de 3 mil metros sobre el nivel del mar, tiene como principal atractivo las famosas salineras, donde en un espacio de aproximadamente 5 mil metros cuadrados, se encuentran distribuidas más de 3 mil pozas de sal a modo de andenes.

Estas pozas se llenan con agua salada natural, la cual se evapora también en forma natural, quedando como sedimento la sal, caracterizada la mayor parte de ella por tener un ligero color rosado.

Aunque cuando vas camino a Maras y tienes una primera visión de las montañas de la salinera, lo primero que ves es una impresionante montaña cubierta de blanco, sí, quizás te lleve a pensar que subiste tanto por la carretera que encontraste nieve, pero no, es sal.

Si no tienes miedo a la altura, caminar por los andenes y entre las pozas es impresionante. Y conforme vas andando puedes ser testigo de todo el proceso. Una poza totalmente cubierta de agua, una poza donde es palpable el efecto de la evaporación, una poza donde solo hay el sedimento tan preciado.

Y dependiendo del nivel de capa de sal en el que esté la poza, puedes apreciar las tonalidades blancas y rosas.

Tómate un momento para hacer un alto, ahí arriba de la montaña, en medio de las pozas para apreciar el paisaje, y si no hay mucha gente, escuchar el silencio y respirar el aire frío, que es como una carga de energía.

Luego de esa pausa puedes dar marcha atrás, salir de Maras e ir a Moray.

A diferencia de los andenes y la distribución cuadrada de Maras, en Moray lo que te impresiona son las formas circulares a modo de anfiteatros construidos en las explanadas de cerros.

Son una especie de andenes, pero construidos no en el cerro, sino para abajo, como subterráneo. Es como cuando tiras una piedra en un lago de aguas tranquilas y dejas que se formen esos círculos concéntricos alrededor del punto central. Así es Moray.

La finalidad de estos andenes fue el simular distintos microclimas para poder tener diferentes tipos de cultivo. Se dice que en total hay aproximadamente 20 microclimas diferentes en todo este complejo.

Admira el paisaje, admira la grandeza de estas construcciones, camina rodeando estos anfiteatros, baja por los distintos niveles y siente los cambios de temperatura, los cambios de humedad. Esto es Moray.